jueves, 15 de agosto de 2013

Restauración comprobador antiguas válvulas de radio.

Quería contaros que un cliente ha confiado en mí para llevar a cabo la restauración de este Comprobador de Válvulas antiguo, este aparato se utilizaba para controlar el correcto funcionamiento de las válvulas en radios; esas radios clásicas, que reunían a la familia antes de la llegada de la televisión y que son objetos que a algunos aún nos fascinan hoy día. 

Haciendo un poco de historia, decir que la radio a válvulas eran unos receptores que se fabricaron después de la radio a galena. El empleo de la válvula triodo y sus posteriores evoluciones permitieron mejorar los receptores de radio y durante mucho tiempo se utilizaron las válvulas en todas las radios hasta que se inventó el transistor y luego el circuito integrado.

  • En estas dos fotos se resume todo el proceso:
ANTES

 

                            
DESPUÉS



Ahora os voy a ir mostrando el proceso de restauración de la caja de mecanismo para comprobar antiguas válvulas de radio.

                               







Arriba y a la derecha podemos observar la caja totalmente deteriorada y con la tabla de la tapa rota, mientras que abajo vemos el interior con el mecanismo.


























En la parte de arriba, se ha retirado la tabla rota y a la izquierda ya se ha sustituido por una nueva. También podemos ver que hemos quitado todos los herrajes y la hemos lijado completamente.
Abajo ya está tintada y con el herraje colocado de nuevo.














                                                                                                                                                                                                                                                                                                  



En la parte superior un primer plano de la caja ya tintada y a la derecha con acabado a la cera.

En la parte de abajo podemos apreciar el interior también restaurado.












Como habéis podido ver, a veces tenemos cosas u objetos en casa casi olvidados que no sirven para nada, o eso pensábamos... y sin embargo después de un proceso de restauración el resultado final puede ser bastante bueno, ¿no os parece?.

miércoles, 7 de agosto de 2013

Porche con tiseras.



Quien dijo que la carpintería ya no es lo que era, que los carpinteros ya no hacemos trabajos tan buenos como los de antes y que los materiales y maderas que utilizamos son peores que los de antaño; incluso hay gente que me ha comentado que hoy en día cualquiera es carpintero y que todo lo hacen las máquinas. 


Yo siempre les digo lo mismo, y es que hoy en día todo es muy caro y que el propio cliente es el primero que mucha veces escatima en los materiales que se van a utilizar. 


Precisamente ahora que tenemos esas máquinas, que algunos erróneamente piensan que lo hacen todo y tenemos la posibilidad de utilizar materiales de muy buena calidad, si nos gastamos un poquito más en dichos materiales, que son tan buenos por no decir mejores que los de antes, podemos hacer trabajos como el que estamos viendo o mejores.


Ya sé que muchos profesionales como yo pensaran que para hacer este porche no hacen falta muchas máquinas y precisamente por eso lo he puesto como ejemplo, porque a excepción del rayado de las vetas con cepillo de alambre, todo lo demás está hecho con las mismas máquinas que había hace 80 años o incluso más en países que en aquella época estaban más desarrollados. Juzgad vosotros mismos si se pueden o no hacer trabajos como los de antes, yo no soy quien para hacerlo pues solo entiendo un poco de esto.


Estoy seguro de que gracias a esas máquinas, hoy en día podemos disfrutar de trabajos con acabados tan perfectos y excepcionales como los propios clientes nos piden y que hacen que en este oficio en el que estamos aprendiendo toda la vida, podamos 
desarrollar y aumentar nuestros conocimientos y seguir trabajando cada día mejor.


Conclusión que sacamos de todo esto: Que ni San José podía hacer tan buenos trabajos como los de ahora por falta de medios, ni los carpinteros de hoy en día dependemos solamente de esas máquinas.

Espero que nadie de dé por aludido ni ofendido, no era esa mi intención y si ha sido así ruego me disculpen, pero estoy seguro que los que se dedican como yo desde hace mucho tiempo a este bonito oficio me entenderán perfectamente. A todos ellos animarles a seguir aprendiendo y capear la crisis lo mejor que puedan, que por el bien de todos espero no dure mucho tiempo.

Si os gusta este porche, que he realizado en colaboración con mi gran amigo y compañero Ángel García,  podéis ver más detalles en la página de porches y pérgolas.